martes, 18 de diciembre de 2012

Unos instantes

La noche, la vela, la tetera,
la música de una guitarra,
el público,
tú... y yo.

El cuerpo de la música que evoca todas las sensaciones,
la voz que acompaña acompasada introduciendose a cada nota.

Tú cantas, ¿qué cantas?,
yo escribo, ¿qué escribo?
¿cómo se cuenta?
¿ésto cómo se cuenta?

Una pausa.

Levanto la mirada,
algo de oro blanco en los labios,
y observo las pupilas,
en algunas encuentro solo ojos,
y en otras corazón y calor, mucho calor.

El alma se te despega
y viaja en el pentagrama,
encima de tu voz.
Tú cantas, 
"tus caricias mi alegria, 
suspiros de rosas, 
a la luz de la candela"
Yo escribo,
"Palabras de gratitud
 para todos los que guardan silencio"


sábado, 15 de diciembre de 2012

viernes, 7 de diciembre de 2012

¡Va por vosotros!

Dos mundos,
ponte en situación,
¿te los imaginas?
Uno será una mierda,
pero el otro...
el otro es la hostia.

¡Un brindis por los que me comprenden!
¡y otro por los que lo viven conmigo!

¡¡Salud!!

jueves, 6 de diciembre de 2012

Disociación

Nos empeñamos en estar donde somos,
cuando debemos ser donde estamos.

¡Genial!,

Pero la realidad no siempre nos deja,
y tenemos que convivir con ese estar donde estamos,
dejando al como somos subjetivamente en nuestro presente.

¡Vaya tela!

(Fragmento de sueño, soñado a las siete de la madrugada)

domingo, 2 de diciembre de 2012

Trazados

En este instante,  tengo ganas de escribir.
¿El qué? no lo se, simplemente de escribir.
Sera inspiración de la música entre coros de silencio, la imagen en la pupila de la  luz de las farolas amarillas, tenues en la lejanía, aliñadas, estáticas, o el sentirse bien después de compartir vida con hombres y mujeres de carne y hueso, marca Alma.
Escribir.
Escribir, ¿de qué?
Pues escribir de escribirse a uno mismo, escribir para no olvidar como es la curva de los labios cuando expresan, el color del pelo al trasluz. El sonido del solo de una sonrisa cuando se aisla de la calurosa algarabía de las risas de todos.
Y esto que parece una fantasía es la realidad de la que venimos y de la que nos alejamos cada vez que dejamos de inventar nuevas curvas en nuestra cara.
Escribir.
Escribir sencillez, que es lo que dejan los buenos momentos.
Trazar sencillez.